Hoy debían jugar Milwaukee contra Orlando, pero los jugadores no se presentaron en repudio al ataque policial a Jacob Blake.
El partido de hoy entre Milwaukee Bucks y Orlando Magic, correspondiente a los play off de la NBA, no se disputó a causa de una protesta de los jugadores, que decidieron no salir a la cancha. Posteriormente, la liga suspendió todos los juegos de hoy. Este boicot se originó en respuesta al ataque policial contra el ciudadano afroamericano Jacob Blake el 23 de agosto en el estado de Wisconsin.
Debido a que el hecho policial sucedió en el mismo estado donde está la ciudad de Milwaukee, los jugadores de los Bucks sintieron que debían actuar.
En la previa, se mediatizó que los jugadores optarían la misma medida entre Oklahoma City Thunder – Houston Rockets y Los Ángeles Lakers – Portalnd Blazers. En consecuencia, la organización no quiso problemas y suspendió los encuentros. Asimismo, se convocó a todos los jugadores en la burbuja de Disney a una reunión hoy para decidir cómo continuar.

Al respecto de la cuestión, los jugadores de los Bucks leyeron un comunicado ante la prensa en el que explicaron que la medida fue un reclamo de justicia para Jacob Blake y para exigir que el policía que disparó rinda sus cuentas:
“Para que esto suceda, es imperativo que la legislatura del estado de Wisconsin se vuelva a reunir después de meses de inacción y tome medidas significativas para abordar los problemas de responsabilidad policial, brutalidad y reforma de la justicia penal”.
Los dueños de la franquicia de los Bucks emitieron un comunicado al respecto a la medida:
“Apoyamos a nuestros jugadores y la decisión que tomaron. Pese a que no sabíamos sobre esta decisión, también la hubiésemos apoyado. La única manera de traer un cambio es poniéndole el foco a las injusticias sociales que ocurren delante nuestro. Nuestros jugadores han hecho eso y nosotros continuaremos apoyándolos y demandando responsabilidad y un cambio”.
Cabe recordar que el hecho fue filmado con un teléfono celular y muestra a un hombre afroamericano seguido por dos policías con armas en la mano mientras rodea la parte delantera de una camioneta gris. Cuando abre la puerta y trata de sentarse en el asiento del conductor, uno de los agentes lo toma por la camiseta y parece dispararle repetidamente en la espalda. Se pudieron escuchar siete disparos en el video. Aun así, se desconoce el causante preciso de la situación, que no llegó a ser filmado.
Es preciso mencionar que Blake tiene, por el momento, la parte inferior de su cuerpo paralizado.