Dos goles de penal le bastaron al Tatengue para llevarse la victoria a Santa Fe, claro está, que el Var incidió mucho en el último tiro de los doce pasos.
Cómo lo dice el título, Unión dió el batacazo de la fecha 5 (por el momento). Le ganó al Xeneize en una Bombonera repleta y en un día sobre todas las cosas bastante especial para el hincha y para el club, por qué se festejaba el cumpleaños del máximo idolo de la institución, Juan Román Riquelme, quien vivió el partido desde su palco.
PRIMER TIEMPO
Los dirigidos por Sebastián Battaglia (quien puso un equipo alternativo pensando en la Copa Libertadores), arrancaron el encuentro dominando al rival buscando el desequilibrio en la defensa visitante, la cual se encontró fuerte y ocupando bien los espacios vacíos. Claramente la primera parte se rompió luego del penal ocasionado por Jorman Campuzano a Nardoni, que el mismo cambió por gol, pero la historia siguió y unos minutos después, Esquivel derribó dentro de su área a Medina, el árbitro cobró penal y Salvio volvió al gol (En plenas negociaciones con su renovación).
SEGUNDO TIEMPO
En el segundo tiempo se profundizó el dominio de Boca, pero fue más territorial, más de posesión, que una superioridad efectiva en la red. Quizá por eso, después de ver un largo letargo de control de pelota sin llegadas francas, fue que Battaglia decidió poner a Villa y Zeballos, los delanteros más picantes y también a Óscar Romero y a Pol. ¿Era necesario poner al colombiano, justo el día en el que se conoció otra denuncia por violencia de género? Como fuere, el entrenador pensó más en la necesidad de ganar para llegar a la punta que en las formas, pero ni siquiera con los titulares en la cancha Boca pudo edificar una diferencia en el juego primero ni en la red.
Más bien fue lo contrario, porque Unión salió del asedio a pura presión y sobre el final metió un par de contras picantes. La diferencia la hizo con polémica, aunque el penal de Izquierdoz fue adentro y García se adelantó en el primer intento de Troyanski. Así, Boca no pudo ganar y quedar primero. La pena máxima.