Con uno menos, el seleccionado argentino perdió por 39-10. A los 18 minutos de la etapa inicial, Tomás Lavanini vio la roja por un tackle alto y dejó al equipo con 14. La despedida del Mundial está a la vuelta de la esquina.
El sueño de Los Pumas se esfumó en prácticamente 40 minutos. El conjunto dirigido por Ledesma comenzó ganando con un penal pero «La Rosa» sacó a relucir su buen juego y dejó ver las falencias del equipo nacional.
A los 8 minutos, llegó el primer try del seleccionado europeo de la mano de May que no pudo aumentar la ventaja tras un fallo en la conversión por parte de Farrell.
Todo se empezó a caer a los 17 minutos cuando el árbitro galés Nigel Owens expulsó a Tomás Lavanini. El hombre de Los Pumas se retiró del Estadio de Tokio por un alevoso hombrazo que le propinó en la cabeza a Owen Farrell tras un tackle alto.
Aunque el seleccionado se mantuvo firme después de esto. Recién a los 35′ sufrió la segunda conquista con Daly entrando por el lado izquierdo. El golpe de KO lo aplicó Youngs a los 42′. Al menos, Farrell, mandó todas sus patadas afuera (0-4). Pero era demasiado seguir con ilusiones yéndose 15-3 abajo ante un equipo sólido como el inglés.
El segundo tiempo fue todo de Inglaterra. A los 4 minutos llegó un nuevo ensayo con Ford que le daba el punto bonus a su equipo y una nueva clasificación a los cuartos de final de una Copa del Mundo.
Los Pumas hicieron lo que pudieron con un hombre menos en la cancha. El premio llegó con el try de Moroni a los 70′, Aunque, como en el PT ante Francia, no era fácil encontrar los caminos. Claro que esta vez estaba más justificado, con 14 y frente a un equipo como el de Inglaterra, candidato al título.
Con esta derrota el Seleccionado Argentino de Rugby queda con 6 puntos contra los 15 de Inglaterra ya clasificada y los 9 de Francia. Aún restan chances de clasificación, pero parece una quimera.
Los Pumas tendrán que ganarle a Estados Unidos en la última fecha del Grupo C, pero con eso no les bastará ya que necesitan que Francia pierda ante Tonga, difícil pero no imposible, y ante los ingleses. ¿Se dará un milagro?