En Bielorrusia, Burindi, Nicaragua, Tayikistán y Turkmenstá la pelota sigue rodando sin importar la pandemia del coronavirus. Estos escasos países que decidieron retomar al fútbol, dieron sus motivos: por lo económico; porque no tenían de qué preocuparse o simplemente porque el espectáculo debe continuar, sin importar lo que pase con la epidemia.
Debido al Covid-19, en muchas partes del mundo se vieron obligados a decretar aislamiento obligatorio o suspender las actividades en las que se junta gran cantidad de personas. De modo que todos los países que sufren del coronavirus, han decidido detener las competiciones. Sin embargo, siempre hay una excepción y cinco naciones decidieron que el fútbol tiene que seguir.
Nicaragua fue el único país del continente americano que decidió proseguir con el campeonato, pese a que cuentan con 9 casos de coronavirus y una muerte. Esta decisión tiene a los nicaragüenses descontentos y preocupados, ya que sienten que no se los están cuidando como es debido.
En Asía hay dos países que decidieron retomar sus respectivos calendarios deportivos: Tayikistán y Turkmenstá. Comparando la situación de Nicaragua y de ambos países asiáticos, el panorama es bastante diferente. Ya que Tayikistán volvió el fútbol en la primera semana de abril, porque el presidente, Emonali Rahmon, aseguró que no hay infectados y, por lo tanto, no encontró ningún motivo para suspender el fútbol. Aunque por el bien de los tayiko, los partidos son a puerta cerradas.
Por otra parte, en Turkmenstá volverá a girar la pelota el fin de semana próximo, luego de haber estado parado un mes (desde el 13 de marzo). El presidente, Gurbanguly Bernimuhamedo, aseguró que el coronavirus es sólo un mal para la economía y, por eso, no ha puesto a la población en cuarentena obligatoria.
El país Burindi tuvo 5 casos de coronavirus, en el cual uno falleció. Sin embargo, el fútbol de la primera y segunda división siguen con el campeonato normalmente, pero cuentan con las precauciones necesarias para los futbolistas burundés.
Por último, el país europeo, Bielorrusia, retomó sus actividades porque la gente tiene miedo y necesitan distraerse. El presidente Aleksandr Lukashenko, aseguró que no hubo ningún muerto de Covid-19 y le pidió al pueblo bielorruso que se queden tranquilos. Sin embargo, pese a sus declaraciones, las estadísticas informan otra cosa: 29 muertos por coronavirus y casi 3000 infectados.